domingo, 23 de agosto de 2015

Sobrio.


La luz de advertencia brillaba por encima de la madriguera del conejo, reflejos rojos que encendian su pared a lo lejos y son probablemente la causa, de su continuos ataques de panico.

Yo lo presagie cuando estaba sobrio, le describi una figura tragica y elemental, tan triste como las canciones que escuchas cuando ella no esta, entonces me pare y no pude terminar, les dije "señores reclamo total dominio sobre la niebla de Lima, sobre sus flores amarillas, sobre su eclipse lunar" no estaba seguro a quien me dirigia, pero tarde o temprano encontraria un lugar.

El gran cuervo se paro y extendio su ala derecha y  señalo las cuencas de los ojos, de una antigua calavera que estaba tirada en el suelo, no hablaba, realmente no entendi lo que decia, un pequeño zorro intentando traficar esclavos, desde Genova a hasta Marruecos, indico que se referia a las primeras peliculas de Kurosawa, diablos rojos , facinacion en blanco y negro, la insana dependencia de quererte mirar y yo no entiendo por que cuando me hablaba sonreia, pequeño zorro medio dia, pequeño zorro donde estas...

Y todos los demas rieron mientras agitaban sus copas esperando la siguiente frase que pudiera decir, no quiero ser interesante, soy vacio y ridiculo, yo estaba nervioso y pausado, ahogado por ese sentimiento que te invade cuando sientes que estas equivocado, en el momento inexacto y con una cara prestada, tenia algunos tratos, que no podia cumplir, ella siempre me ponia nervioso y bueno supongo que me gustaba, la detesto y la quiero pero creo que ya va siendo tiempo, de dejarla partir.

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